Por la luna

Esta noche en cual la luna muestra un esplendor sereno,

a veces luz escondida bajo lentas nubes blancas;

viene a mi memoria sonrisas, palabras, tus caricias

y nos cautivan alma y cuerpo a encontrarse en este ensueño.

Fugaces testigos de larga estela dejaron huellas,

de aquellos destellos de amor fueron cómplices estrellas

y también el brillo de tus vivos ojos fue tan fuerte

de verlos llevaré su fuego y caricia hasta la muerte.

Nubes lentas, que al astro nocturno arrebatan tu piel,

cómplices de mis ojos y de sentir solo tu miel;

quietas, distantes, celosas de la furtiva malicia,

esperando bajo el escondido pudor: tu caricia.

Las mil locuras que esta noche arrebatan mis ideas,

nacidas rebeldes del juicio social disparatado,

completo me arrastran a vivir envuelto a tus sentidos,

admito: soy loco si te olvido y loco si me olvidas.

Por cuantas y tantas lunas fui acusado de demencia,

tanto y cuanto desgarrado todo mí ser por tu ausencia,

tanto y cuanto desvariaban en mis sueños fantasías,

cuantas tantas alabadas carcajadas y alegrías.

Hoy en pleno, la luna nos ofrece su resplandor,

alucinante es para ti, si hoy mi corazón encuentras

ya que a bien de ser feliz, sólo feliz, mi gran amor,

admito: soy loco si te olvido y loco si me olvidas.