En el silencio de la noche, ella escribió:
“Querido tauro, amado,
son tus caricias néctar divino.
Amado acuario, anhelado,
es tu recuerdo el pan y el vino.
Esta es mi vida,
estos mis amores;
embriagante bebida,
perfume de flores.”
Después, extasiada y reflexiva pensó:
“Acuario forma mi pasado,
su recuerdo me abriga hoy.
En mi corazón quedó guardado:
de su dulce añoranza soy.
Yo soy una.
Yo soy dos.
Yo soy todas.
Yo soy yo.”
Sorprendiéndose a sí misma, continuó:
“Tauro es mi roca y mi soporte,
para siempre mi fiel amante.
Es mi constante y mi baluarte
y nuestro amor vive triunfante.
Yo soy una.
Yo soy dos.
Soy del diablo.
Soy de Dios.
Este es mi vida de antes y ahora.
A los dos los tengo presentes.
Sin pensar en ellos no paso una hora.
Son mis motivos permanentes.”
El tiempo pasó y divertida canturreó:
“Esta es mi vida,
estos mis amores;
embriagante bebida,
perfume de flores.”
María Teresa Ruíz Rentería © Todos los derechos reservados.
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- Autor: María Rentería (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 6 de abril de 2017 a las 01:42
- Comentario del autor sobre el poema: Porque el ser humano es complejo...
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 57
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, Anitaconejita
Comentarios2
Muy hermoso su poema amiga María
Un placer su lectura
Críspulo
Muchas gracias, amigo de la Rosa. Un placer su compañía y amable comentario. Besos.
Interesante poema Acuario un pasado con influencia en hoy , un Tauro que le da fuerza a tu vida. Buena combinación de sentimientos. Saludos amiga
Y ella respondió asombrada: "compleja complejidad de complejidades que escapando a toda lógica completan y no dividen el corazón"... muchas gracias Fabio. Besos.
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