Llevando tus recuerdo partí una mañana,
tus besos en mis labios se fueron adheridos,
recién te sentí tan mía y te vi muy enamorada,
y en tus brazos descanse mis días cansados.
Quizás no me sentiste, pues estuve a tu lado,
y buscaste en el mar una tarde de sosiego,
recuerdo que desde que llegaste viví enamorado,
pero me encantaba también ser tu amigo.
Mis manos angustiadas tu cuerpo exploraron,
me mirabas sonriente pidiéndome que no lo haga,
pero al sentir tu aliento mis huesos estallaron,
mi cuerpo se incendiaba y sentía que te amaba.
Para darnos un paseo me cogiste de la mano,
la gente me miraba talvez con mucha envidia,
tu belleza se enmarcó en un nuevo pergamino,
que irá por siempre conmigo como mi alegría.
Llego mi partida y te abracé muy fuerte,
me diste un beso intentando no despintarte,
hoy tu amor me lleva a una nueva suerte,
que en esta distancia aprenderé a quererte.
No quise despedirme, pero era ya mi partida,
me dijiste adiós y sin dar vuelta te marchaste,
los días han pasado y vuelve a mí la herida,
por aquellos recuerdos y besos que me diste.
No quisiera olvidarlo esos bellos momentos,
de aquella mañana, de mi triste partida,
pero no puedo dejar esos sentimientos,
que tú entregaste a mi alma herida.
- Autor: Federico Mendo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de abril de 2017 a las 11:41
- Categoría: Amor
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: anbel
Comentarios2
Lindo...Hay amores que no se olvidan. Un sincero abrazo.
Siempre es un placer encontrar tu cariñosa huella en mis letras, y ese apoyo incondicional, muchas gracias Dios te colme de bendiciones siempre. Te envío un abrazo grande con mucho cariño.
Nos regalas letras que relatan el incomparable amor que abriga tu mente.
Un gusto leerte.
Agradezco tu comentario y gracias por dejar tu huella en mis versos que con mucho gusto comparto. Un abrazo para ti
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.