Algún deseo se habrá ido,
cuando lo dejé a orillas del mar,
siempre lo tuve entre mis manos
y era hora de que las olas lo lleven algún lugar.
Con ilusiones lo hice pensando,
que alguien lo pueda encontrar y apriete fuerte sus sueños
para que se hagan realidad.
El instante se detiene y aquel niño que lo encontró
dejó ir sus tristezas que en alegría se convirtió.
Así andará naufragando por los mares
Viajando sin rumbo para llegar muy lejos
en donde el puerto es el alma,
y el corazón el recuerdo.
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Autor:
EmSol (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 3 de mayo de 2017 a las 20:33
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 64
- Usuarios favoritos de este poema: Rubén Martín Pereyra, Silvestr
Offline)
Comentarios1
Hermoso final, muy dulce sabe este poema amigo mientras se lee.
Me gustó mucho.
Gracias.
Hola bienvenido!! muchas gracias por tus palabras y me encanta que te guste.
Gracias a usted por el verso.
Lindo día.
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