Me preguntas, ¿quien es ella?,
querido amigo ella es mi sueño frustrado,
la chica que durante casi dos años me ha tenido preso,
preso de un hechizo, de un hechizo bello,
porque amo estar a su lado, amo su mirada, sus ojos,
su forma de pensar, y me gusta verla cuando esta distraída.
Y aun que se, que es difícil llegar a su corazón,
en mi vida ella provoca la mas hermosa reacción,
ven a mi pequeña de amor.
¿Quien es ella? aun no lo se,...
la confundo con un ángel, pero que vive en la tierra,
si ella se va, no estoy tranquilo.....
me gusta verla llegar, y odio verla irse....
por que...
¿Quien es ella?
La chica que porque si quiero, y que,...
aunque somos tan distintos, me lo dice mi instinto,
en lo mas profundo somos iguales....
¿Quien es ella?
Eres tu bella luz que parpadea a mi alrededor...
aunque se que no eres como las demas ..
yo se que en el fondo, en el fondo esta una niña dulce y tierna,
lo he podido ver...
¿Quien es ella?
Mi bello ángel intocable,
la estrella de las mañanas...
Y hoy me inspiras a escribir y recitar estos versos..
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Autor:
Literatura CI (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 16 de mayo de 2017 a las 20:10
- Comentario del autor sobre el poema: Estos versos están dedicados para la chica durante todo un largo tiempo ha sido mi obsesión y mi mas hermoso sueño.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 151
Offline)
Comentarios3
Para escribir solo basta estar inspirados y el amor es uno de esos motivos, fue un gusto pasar a leerte, saludos cordiales,
Thenamora.
Gracias por pasar a leer 🙂
Bello prosa poética.
E interesante seudónimo Literatura con CI
Gusto leerle
Bienvenido!
Muchas gracias por leer y comentar, 🙂
Después que pasan su fase de ángel, conviene verlas terrenales, compañeras, transeúntes igual que nosotros por el río de la rutina, y luego, enfrentarnos al reto de su aceptación o su rechazo, declarándoles el amor que nos provoquen; no queda otro paso para iniciar la última fase, la del gozo y la experiencia conjuntos.
Así es mi estimado, pero duele cuando eres rechazado
Gracias por leer y comentar 🙂
Hay que prever el rechazo, y si ocurriera, siempre es posible una salida elegante, a la altura del reto; y luego partir con la dignidad de quien hizo tuvo el valor de mostrar una de las partes más profundas del alma.
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