PARA CUANDO ME OLVIDE DE ESCRIBIR.

PARA CUANDO ME OLVIDE DE ESCRIBIR.

Aunque no este en mis planes, llegara ese día
en que el olvido protegerá la consciencia.
y poder saber, ¡si es que todavía,
mantengo la capacidad de leer!!.

¿Que significaba para mi escribir
así fuera poesía, un relato, una pequeña rima,
una simple anécdota, un recuerdo?.

Eran más que palabras, oraciones y rimas.
escribir era hablar con el corazón en la mano,
escribir era expresar mi pensamiento al máximo,
hacer que la corriente de sentimientos
se apoderase de mi corazón,
haciendo que poco a poco mi pluma
se moviera mas rápido he hiciera las palabras
no fueran palabras, fueran no solo cosas
que el sentimiento transmitía al papel.

Ese papel que absorbe todo,
que guarda todo lo que uno le confía,
que cuenta todo cuando lo autorizamos,
que gentilmente se prestaba
como medio para bien o para mal.

Ese papel, el que podía borrar y borrar
pero siempre dejaría una mancha.

Pero la poesía o cualquier escrito
aun no estaba escrita en papel,
estaba guardada, escrita en mi corazón,
quien dictaría al papel, sin pretensiones,
la idea de dejar huellas en otros corazones,
tanto o más que en el límpido papel.

Corazones que como en una hoja en blanco,
se escriben historias y se dejan recuerdos,
se escriben promesas y se dejan angustias;
se escriben lugares y se huelen perfumes
se escriben nostalgias y se oyen canciones
se alimenta de palabras, que asemejan rezos
cada vez que que se escribió un te quiero,
cada vez que hicieron palpitar con fuerza la palabra.

Por que la poesía nace y crece de dos formas,
cuando estás muy feliz, tan feliz que piensas
que no estás en ese momento,
o cuando estás tan triste que quieres olvidar
los amargos recuerdos, los llantos llorados
adioses gritados que no borraron aun su eco.

Así es que trataba de lograrlo,
dejando que el suave papel
impregnarse de sentimientos
y causasen un raro efecto en algún casual
porque el papel siempre sería papel
y los sentimientos siempre se harían poemas.

Si algún mérito tuve, fue haber sido un buen lector,
jamás un ESCRITOR, ¡Si! un hombre que ESCRIBE
La educación no solo la otorgan las Universidades.

Mi universidad, LA VIDA.
Puede lo que en estos momentos se lea,
nada o poco sea autentica mente mío,
solo producto de leer, leer, leer y leer,
que al fin y al cabo de eso se trata.

No se puede intentar ser "ESCRIBIDOR"
si no se es buen lector.

Cariños y perdón por haber sido tan extenso.

Nicolas Ferreira Lamaita.