Ella me beso cuando mi corazón todavía crecía
volviéndome, de repente, un adulto consumado:
jamás había sentido una experiencia en mi vida
que brillara tanto como la de un sol enamorado.
No pude negarme a la adicción de sus sentidos:
cada uno era un bosque donde feliz te perdías.
El fuego que manaba de sus labios era suspiros
deseando que fuese eterna su esencia bebida.
No puedo dejar pasar un segundo sin recordar
lo que figuró para mí sentir su boca en la mía:
era como el agua de lluvia, dulce como bailar,
era lo que una eternidad volviéndose osadía.
Aún recuerdo lo maravilloso que fue ese día
cuando, siendo pequeño, la pude encontrar:
por ello, daré gracias a Dios por esta regalía
que con alegría guardaré para jamás borrar.
- Autor: Vito_Angeli (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de junio de 2017 a las 19:01
- Comentario del autor sobre el poema: Como poder no recordar esa sensación del verso puro, de ese que sale del corazón y termina en los labios para unirse con otros labios. Ahh, es puro ese beso, como el amor. Espero que lo disfruten. Saludos.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 50
- Usuarios favoritos de este poema: El Silente Vagabundo, Alexandra L, Ross4, LeAnDro silencio es salud en soledad
Comentarios2
precioso sentir
Muchas gracias Edith por tu comentario. Saludos.
Un lindo sentimiento que transmites en tu versar. Gusto leerte . Saludos.
Muchas gracias por tu paso y por comentar. Saludos
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.