Me abrazaste.
Y por primera vez después de muchos años,
sentí mis huesos frágiles y como mi cuerpo se desvanecía entre tus brazos.
Por primera vez después de muchos años, no sentía un llanto tan profundo desde mi interior, y sentir como el pecho se aplasta entre suspiros ahogados. ¡Suspiros que ahogan y no te permiten respirar! Te aprietan gritos enmudecidos en la garganta y te hacen sentir en un estanque lleno de penas, de vergüenza y de dolor.
Por primera vez después de muchos años, no miraba a alguien con tanta lágrima en los ojos. Un dolor indescriptible por la guerra entre mi cabeza y mi corazón que susurraban: —¡Escupe en su cara!—, —¡Gritale!—, —¡Déjalo ir!—, —¡Que se vaya a la mierda!—, —El amor de tu vida...—, —La historia más bonita jamás vivida—.
Por primera vez después de muchos años, no tenía tantas emociones encontradas. Odio, asco, amor, ternura, impotencia, ganas de llorar, ganas de matate, ganas de abrazarte y pedirte que no me hagas esto. Pedirte que no me abandones pero que tampoco me hieras.
Por primera vez después de muchos años, no recordaba tanto una historia. No me daba tantas vueltas en la cabeza y no pensé volver a querer sentir ese mariposeo ansioso que dice "Quiero volver a vivirlo", "Quiero volver a sentirlo"... sentirte.
Por primera vez después de muchos años, no sentía algo así. Creo que la última vez fue a los 8, al perder a "Pichis", mi gato. Un animal peludo y egoísta que rasguñaba y acariciaba. Era extraño. Me hacía cosquillas con su cola en la oreja y pasaba sus uñas por mi cabello. Después se volvía loco y me atacaba. No sé si me odiaba o su amor era recíproco. Pero mi inocencia me hacía creer que no merecía que me rasguñase, aunque actualmente lo que pienso es que sólo quería divertirse. Me parecía injusto.
Por primera vez después de muchos años... no amaba tanto. Peor aún, por primera vez después de muchas vidas. Nunca amé a nadie como a ti.
Por primera vez después de tantas vidas, jamás imaginé volver a encontrarte y que cometamos los mismos errores de las anteriores, y de los viejos amores.
Por primera vez después de tantas vidas, no pasó por mi mente encontrarnos así. Tú y yo. Que nos fundíamos en un abrazo y nos volvíamos eternos.
Por primera vez después de tantas vidas, no pensé llegar a extrañarte tanto desde antes de tu partida, ni amarte. Amarte desde antes de conocerte.
Por primera vez. Te conocí y me enamoré perdidamente de ti.
Por primera vez, me duele como nunca, como todo y como nada.
Por primera vez... adiós.
- Autor: Nadia Almazán (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 2 de junio de 2017 a las 14:39
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 55
Comentarios1
Amor así: duele, ama, siente, odia... se renueva?
Empieza y muere y otra vez.
Un abrazo y felicidades.
Agradezco tu tiempo para reflexionar este pequeño poema.
El amor no duele, duele nuestra inconsciencia enfocada hacia nuestro amor.
Gracias nuevamente, de verdad.
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