Angustia.
El tiempo ya no pasa. La pierna derecha pendulea con rancio afán, un movimiento involuntario cargado de ansiedad. ¿el pecho?, un agujero negro de infinita gravedad. Algo galopa con brío, resuena en mis oídos, palpita con sordidez, dejando en mis oídos un golpe seco. El mundo se escurre otra vez.
Insomnio.
Cada noche, la cabeza grita con miles de voces, cada una tiene una pregunta distinta, cada una tiene una opinión distinta. La esperanza esta muerta, 8 disparos y un jardín marchito. El poco sueño conseguido, se envenena con sueños de su risa, y la utopía que por primera vez parece estar muerta.
Consuelo.
Todas las ilusiones huérfanas encontrarán sus padres.
El vicio.
El universo y sus estrellas.
Visceral.
Este hijueputa poema.
La cura.
Aún no se ha escrito.
Comentarios1
Estoy descubriendo tus letras hoy y me permito hacer un recorrido por toda tu obra publicada y no me queda más que expresarte mi admiración por los contenidos tan profundos y sensibles que obsequias a tus lectores.
Un abrazo y no te ausentes tan largo.
Yajaira del Ávila
Los sentimientos tienen la magia de hacer que el amor distante
se sienta cercano, el amor no tiene barreras y se expande en el alma
y el espacio como un volcan de sentimientos.
Buena semana
Amalia
Gracias por dedicar el tiempo a leer ese constructo que está aún infante. Sobre la ausencia es complicado. Abrazo lleno de tinta y letras.
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