Se volvió común despertar y no esperar un mensaje de una persona importante;
Un buenos dás, buenos deseos para tu trabajo, o vamos más lejos;
Un Te quiero...
La vida cada vez es más monótona,
estudiar, ser profesional, conseguir un título, trabajar para pagar deudas, y si es posible, lograr la tan anhelada pensión.
Todo es relativo, todo es un círculo, el trabajo, el estudio, las amistades;
la vida es un va y viene de circunstancias y oportunidades,
un buen trabajo, una buena familia, un buen viaje, lo que todos deseamos, una buena vida.
Ahora es mejor acostumbrarse a estar solo;
o mejor, no acostumbrarse a nadie.
Las personas de ahora no valoran una amistad, una relación, una persona que da todo por ellas pero que como todo lo de este mundo, tiene errores.
Ya se perdió el valor de una amistad, se nos ovidó hablar, solucionar diferencias;
Al parecer ya no nos importa mantener una persona en nuestra vida, aceptarla con sus errores, ayudarla a ser mejor persona y que a la vez nos ayude a mejorar.
Cada vez entramos más y más personas al círculo vicioso de la indiferencia, indiferencia que poco a poco acabará con nuestra pobre humanidad;
Una pobre humanidad que está más perdida que nunca..
- Autor: Alejandro Peláez ( Offline)
- Publicado: 5 de junio de 2017 a las 11:12
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 77
Comentarios1
Las costumbres han cambiado bastante; quizás mucho, pero por suerte sigue habiendo gente buena y no todo está perdido. Saludiños, amigo Alejandro.
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