Nada.

 

Como rayos de sol naciente quebrando la oscuridad de otra noche, sentí que tu luz aclaraba la apatía de mis días..

Luego el grito ensordecedor del silencio rompió con la verdad esta ilusión de cristal, castillos construidos en el viento..

Ingenua y libre de maldad es el alma que sueña, entregándose al milagro de amar...olvida que de nada es dueña..

He perdido la partida aún antes de jugar; mío no fue más que el anhelo, tratando de tocar el fuego, me quemé en pleno vuelo...

Por querer alcanzar al sol del cielo, siendo solo una estrella más, me he cortado yo misma las alas...ya nada poseo.

Eres como un rayo de sol; se te puede sentir, pero jamás alcanzar. Una ilusión real.