Todo era imperfecto,
Todo era sufrimiento,
Era un solitario,
Una persona que no conocía el amor.
Mi vida era gris,
Era un hombre sin ilusiones,
Sin motivos,
Alguien que su única compañía era la soledad.
Hasta que llegaste tú,
Mi mundo cambio,
La vida se pintó de colores,
Y el sol me sonrió.
Antes de ti mi vida no tenía motivo,
Antes de ti mi soledad era mi compañera,
Quisiera estar contigo en cada momento,
Dibujando nuestros caminos.
Antes de ti no había ilusión ni motivos,
Antes de ti mi mundo era gris,
Quisiera vivir cada momento contigo,
Haciendo una promesa de amor.
Mi mundo cambio desde que llegaste,
Mi mundo tomó color,
Me llenaste de ilusiones y motivos.
Eres tú, el motivo de mi sonreír...
Por: Luis Fernando Enríquez Aguilar (Fercho Aguilar)
- Autor: Fercho Aguilar (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de junio de 2017 a las 13:59
- Categoría: Amor
- Lecturas: 130
- Usuarios favoritos de este poema: Edmundo Rodriguez, marco kajekai
Comentarios1
"Me llenaste de ilusiones y motivos.
Eres tu, el motivo de mi sonreír..."
Magnífico final, amigo Fecho
Muchas gracias. 🙂 Me alegra que le guste, saludos.
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