Me dices que deje el vino amigo,
tu que nunca compartíste,
victorias o derrotas conmigo.
No estoy solo por placer,
solo me queda el cielo,
que me libra del desconsuelo
de quien acostumbra a perder.
Cuando cuentes que me has visto,
no diga que estoy perdido
o que no tengo domicilio.
Di que en el subsuelo vivo,
que aunque en la sombra sigo,
mismejores amigos son amables
desconocidos.
Cuando hables de mi barba
descuidada, di que es lo único
que crece de mi caudal que
ella es mi nueva identidad,
que no es un disfraz que se someta
a normas ya olvidadas.
- Autor: argantonio ( Offline)
- Publicado: 20 de junio de 2017 a las 15:12
- Comentario del autor sobre el poema: Ya en la antigüedad, había filósofos que se retiraban al desierto o a alguna profunda cueva para mostrar su disconformidad con el mundo, este tipo de personas conviven con nosotros aunque no estén en una cueva, ellos viven aparte aunque no lo parezcan, y solamente a sus amigos les contarán sus pesares y alegrías.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 84
- Usuarios favoritos de este poema: Diego Nicolás García Contreras, Amalia Lateano
Comentarios1
Me da como tristeza.
Un saludo, escribes con mucho sentimiento.
Besos
Amalia
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