Como el gran río Danubio
es mi alma un torrente de emociones que pasa del odio al amor y del amor al odio, pero nada de esos arrebatos de humor,
pueden apagar la llama de ternura que abriga mi alma y conserva este amor por la vida que llevo dentro de mi.
Ni la vieja costumbre de cargar en mis espaldas lunas oxidadas,
aunque estoy aprendiendo a desecharlas cada ves más pronto
y algunas veces ya ni las recojo
si no que las miro con desprecio y continuó mi camino,
o esa costumbre de enamorarme
de la chica mala;
que solo me deja veneno en el alma,
estoy aprendiendo ha encontrar el dulce lado del amor,
en los labios correctos,
a valorar los verdaderos amigos y apartarme de las personas falsas que cargan vacijas huecas,
ya no soporto ver derramarse tanta agua,
y ver como se pierde en el suelo;
como el río Danubio es mi alma un torrente que al verse incomprendido explota furioso,
pero después me calmo; cuando recuerdo que yo también me he equivocado, me equivocó y me equivocaré, queriendo pintar elefantes verdes he pintado elefantes pálidos y lúgubres,
y entonces me lleno de misericordia y comprensión
Como el río Danubio es hoy mi alma, un torrente que pasa del
amor al odio y del odio al amor,
pero sigo guardando la ilusión del niño,
la ambición por la sabiduría; la ternura y la pasión por la vida.
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Autor:
Edu OZ (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 21 de junio de 2017 a las 16:27
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: El Silente Vagabundo, David Arthur
Offline)
Comentarios3
¡Bello!
Gracias por pasar
🙂
Excelente concepto de la vida y del comportamiento, me gustó tu propuesta poética. Saludos amigo
Me alegra que te gustará. Un gran saludo.
Si señor. Buenas palabras en tu hermoso poema Edu.
Me ha gustado leerte .
Saludos amigo,
David
Muchas gracias un placer contar con tu visita.
Un gran saludo.
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