Hoy lloraste sin consuelo,
Y me rompiste el corazón
¿Cómo no conmoverme con tu llanto?
Si pequeño, eres de mi parte
Y enorme, ¿Cómo no amarte?
Hijo ya te dormiste,
Y entre tanto desvelo,
Me dejaste en vigilia
No solo en cuerpo, más también en alma
Pues tu llanto penetró hasta romper mi calma.
Descansa mi hijo,
Que nada hoy quiebre tu soñar,
Yo velaré tu descanso
Y pronto... muy pronto... eso espero con presteza
Tú harás, de mi soledad tu presa.
Comentarios1
Los hijos lo son todo, y se dice que cuando conmueve a un padre ... va ser un buen padre... Saludos.
Gracias por tan amable comentario,
saludos y mis mejores deseos.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.