Llegará un día que la madreselva que cubre mi alma,
Ya no podrá trepar más…
La hiel de sus hojas trazara la línea final.
No sentiré la brisa con perfume de nardos,
Saliendo de tus senos.
El eco de mi sonrisa se posara en un lago congelado,
Me llevare tus te quiero, en el emoji de la carita feliz,
Tatuado en mis labios.
Ya puedes ponerme falta…
Si alguien te pregunta por mí,
Diles que me fui por un caracol sin puertas,
Siguiendo el camino del corazón al llanto.
No pronuncies mi nombre en voz baja,
Diles que me llevé tu almohada…
Llenita con tus besos,
Tirada por un hilo con la forma de tu boca
Diles,
Que la soledad que guardaba de hace dos siglos,
Se escapó, se fue, fuera de rieles, en mi otoño final.
Si te dicen que fui bueno, pero que nunca supe amar,
Recuérdales, que el corazón siempre estará paralelo
A la razón, hasta el mismo momento en que dices adiós.
- Autor: Milan78 (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de junio de 2017 a las 00:42
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 22
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