Cuando te requiero en mis deseos

Débil estoy cuando mi pensamiento perece ante tu inconformidad de no cederme amor.
Espero siempre tu gran reacción para ese gran" si", ven acá.
Espesos son tus pensamientos cuando te requiero en mis deseos.
Los minutos no perecen jamas sobre mis instinto puros de amarte en ese tiempo dado.
Nunca deambulare en ese tormento idilio de aquel "no" por sentirte mal entre engaños, los cuales dices son malestares llenos de frigideces frías, como la neblina es pasmosa en aquella colina.
Recuerdo aquel pasado entre bellos encuentro y choques de nuestros cuerpos bañados de una ansiosa concupiscencia  dulce.

Estoy entre la mañana fría y dulce enredado de los deseos tuyos y  míos
para solo conectarlos en los cimientos infinitos del amor tierno ,
que fluye entre las venas rigurosas del deseo que expande los latidos del corazón
el cual dice en sonidos claros de ser el orbe mas dulce entre el tiempo...

Tiempo riguroso que aceleras mis sentidos en un explosivo pensamiento
en son de la espera de aquel te quiero puro y lindo sobre las suaves sábanas,
que cubren la cama del silencio especial para nuestros encuentros furtivos
con aquellas soledades envueltas de ansias compulsivas con toques suaves de dos pieles...

Distintos son esos roces que envuelven mi mente cuando apuñas mi vida
enredada entre mis brazos para solo llenarme con los sollozos mas dulces,
convertidos en ecos quiméricos en la mañana mas fría y corta para el deseo
de los amores montados sobre el tornillo ingenioso de Arquímedes...

RIVAS JOSE
Barinas-Venezuela
26-06-2017