Mira niña. dejemos esto claro.
Piel morena, labios de fresa, lunares y divinas pecas.
¡Cómo envídio a quien las besa!
Cabello sedoso, muslos duros,
vientre plano y pies descalzos.
¡Cómo te desean mis brazos!
Sales al bosque y los naranjos dan fruto;
desde lejos te veo, de lejos de admiro.
¡Cuánta pasión vive en tu boca!
¡Cuánto brillo, cuánto fulgor!
Descuida niña, le hablaré de ti al que me
pregunte por perfección.
- Autor: Jorge Enrique Briceño (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 5 de julio de 2017 a las 01:28
- Comentario del autor sobre el poema: ¿Te gustaría otro titulo para el poema? ¡Cuéntame !
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 55
- Usuarios favoritos de este poema: Graciela Rivas, Ross4
Comentarios2
Perfecto👌
Como todas las creaciones de Diosssss 👌
Excelente nombre le has puesto, a tu hermoso poema, Jorge, carios, para ti.-
Muchas gracias amigo, me haces soñar. Saludoss 🙂
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.