1-
ARDIDES
Las almas solitarias redimen su fuero,
beben fuentes con boca en desgracia.
Son cuerpos fantasmas de nocturnas miserias,
bajo el día infausto de astros con paraguas.
Sobre su cabeza llueven plomizas copas
refractan postales de ferrosas crazas.
Bermejas catedrales desmoronan pesado mármol
y en la levedad del ser se consume el blanco.
Progenie de abandonadas estrellas,
el oscuro cielo es su única ventana.
La salida de la llaga es falsía gasa de perorata.
Azotados corderos, bajo el golpe
del martillo no envejecen hasta carneros.
No quiere equilibrarse la injuriosa balanza,
el opuesto es la debacle del veleidoso vidente
que al sentido del hacha suspende
la ingratitud Maquiavélica del alfabeto no compete
la veracidad pedestre que deambula tras la ignorancia
Incompetente intersección de ardid aleve,
construye mataderos con desventura ajena.
Que exploten los famélicos parlamentos,
las esquirlas amputen antros voraces
y en incontinente micción se mojen los pantalones.
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2-
AMOR DE PANTALLA
¡ Ay, solitaria soledad ¡
Si tuvieras ojos para verte en el chat
Parece que te aplacan las luces,
Del sensual amor de vidrio
En coloquio inconcluso,
Dialogo imaginario.
Cuanta abundancia de cultivo enamorado y libido engendras.
La timidez y la vergüenza se te asocian de un lado de la red,
del otro, la espera y el ansia se abrazan.
Picotean los pájaros, algunos ilusos, otros sádicos,
con uñas en las teclas.
Las hadas seductoras se emancipan.
al fragor de la batalla sudada,
Hay algo de risa salvadora del yugo diario en lo cotidiano de tu oasis.
Un reparo al sombrío techo donde,
Se abre una gotera de vigor contemplativo.
La soledad se hace compartida y tolerable.
Hay un afán, un lúdico encanto de actuar a vivir.
¡ Las fantasías enardecen ¡
Hay aspirantes a Ladys adulantes,
mancebos con solicitud de Don Juanes y travesías de Barbaroja.
Algarabía en compañía, rojo de piel, tras el blanco gris del vidrio.
Claustro liberado y hormonas dilatadas.
Encuentros de un tiempo, que a veces florecen.
Algunos no relucen, otros se mecen
y cultivan la espera,
el arte de cazar la presa.
- Autor: RICARDO ALVAREZ ( Offline)
- Publicado: 10 de julio de 2017 a las 11:00
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 11
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