había luz en su mirada, y todo cuanto hablaba era paz y tranquilidad. Su compañía era mi refugio, mi lugar donde habitar.
Nunca imaginé que cuando se fuera se llevaría consigo toda mi vida, mis alegrías. Y sólo dejaría en mi la pena y la agonía.
Hizo de mi un jardín de ilusiones, donde plantaba rosas y jazmines de diferentes colores.
Me ayudaba a reír y me ayudaba a caminar. Era mi guía y la persona favorita en la que yo podía confiar.
Nunca me di cuenta de cuanto yo le quería, ni supe valorar su presencia cuando la tenía.
Cuando se fue, me dolió su partida y con un beso en la frente me dijo: "No me extrañes cada día".
Una flor y triste melodía...
Así sello su partida.
- Autor: Agustina Lorca (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 12 de julio de 2017 a las 15:28
- Categoría: Triste
- Lecturas: 52
- Usuarios favoritos de este poema: Adrian Jaramillo, Gustavo95, Dama Roja
Comentarios2
Me encanto 😀
Me alegra mucho que te encante.
Saludos Gustavo95.
Decir adiós
es como contemplar la fugacidad
de un destello a orillas del mar
En silencio
el vaivén de las olas
levanta sus manos
señal laberíntica que acelera el tiempo
Tras su rumbo
van los recuerdos
jirones de humedad
empañan palabras
duelen el alma
ahogan la respiración
en pedazos
se bifurcan
Genial expresión poética Agustina / saludos / Trata de escuchar a Chopin: https://youtu.be/b4Uah9NhC
Saludos Jose Adolfo, muchas gracias escuchare a Chopin. 😊
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