Llegó la lluvia clara, por la tarde,
Viene con esperanzas, a la vida,
La fauna ya abandona su guarida,
Los campos visten verdes, con alarde.
Un horizonte lleno de esperanzas,
En tantas cosas buenas, mejoramos,
Que los campos florezcan, lo deseamos,
Se vuelven ciertas tantas, añoranzas.
Del lago su nivel, se fortalece,
Los turistas deleitan su mirada,
Las aves ya comienzan su llegada,
El sol en el verano, resplandece.
De nieve ya no viste, la montaña,
Tan solo nubes miras, en su cima,
La lluvia que de nuevo, se aproxima,
Un aire siempre fresco, la acompaña.
Con las nubes cargadas, de energía,
Los rayos lo demuestran, con su trueno,
Anuncian la llegada, de algo bueno,
Los bosques se engalanan, de alegría.
En las tardes lluviosas, de mi tierra,
Con el café tomando, dialogamos,
De la zona montañosa que habitamos,
Mientras los rayos rugen, por la sierra.
Los arroyos ya canta, en cascadas,
El agua ya refleja, nuevo ambiente,
Las plantas, se alimentan nuevamente,
Se notan más alegres, las miradas.
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Autor:
Pedro Ruiz Lopez (
Offline) - Publicado: 24 de julio de 2017 a las 12:39
- Comentario del autor sobre el poema: Este poema lo hice una tarde lluviosa de verano, en Pátzcuaro Michoacán , México, es un lugar con un bello lago con islas en su interior con montañas con bosques de coníferas, con un agradable ambiente.
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 97
Offline)
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