Cruzo la esquina, puertas de madera por las que levito, no soy este pensamiento adulterado consignando en el sexo por necesidad vacía, pescando suspiros en lo turbio de sus tardes con telenovela en emisión.
Somos plagas, que pican y gritan,
Que golpean sus adentros cuando estamos dominados, cólericos, inconsciencia del alcohol
Acabado, insaciable, despistada amiga que saludo sin mandar la lengua a que "suene". Asesinatos, suicidios, a cortas distancia, fuego a discreción del monseñor bendito en el monte pillando zamuros torpes.
Stella, hundida en su cúpula llena de palomas ciegas,
El mundo dejó de importarle,
Y ahora sóla en la andanza mortal que han dejado un bolso lleno de fotos rotas en la encimera,
Canta a escondidas,
Canta y se peina,
Inocencia de aves, mascullando el silencio del la tarde ardiente, de los hogares primeros, de los santos en el pecho.
- Autor: Leoner Lozano ( Offline)
- Publicado: 25 de julio de 2017 a las 00:04
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 23
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