¿Me amará usted, mientras…
por mí se sienta amado? –Me dijiste-
Aunque dejes de amarme,
seguirá mi pensamiento delirando tu presencia,
te buscarán mis ojos, entre las sombras de las hojas secas
de ese otoño que se me vendrá encima.
Iré al mar y entre serenatas de caracoles
y entre arrecifes de corales, me llamarás con tu canto;
como hombre, contendré mi llanto y un niño morirá en mí.
Alma Erótica
José Luis Agurto Zepeda
Managua, Nicaragua
18 de abril, 2016
-
Autor:
Alma Erótica de José Luis Agurto Zepeda (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 31 de julio de 2017 a las 09:54
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 104
- Usuarios favoritos de este poema: Poemas de Pepita Fernández, María Cristy, Mariaelena Fon, luz carmen, Raquelinamor
Offline)
Comentarios3
Las olas del mar
entre las caracolas dejarán
mis versos en su andar.
No habrá delirios
y los otoños serán
primaveras para estrenar.
¿Me amará usted, mientras
por mí se sienta amado? –yo le pregunté-
Y el verso se hizo respuesta
cuando el amor habitó el dulce mar
entre las danzas de nuestras bocas
y las caricias entre los arrecifes de coral.
Un beso , amado poeta
Bella inspiración a tan bello poema de José Luis .
Abrazos
Y fue en esa playa de ensueños,
en que yo fui tu dueño,
donde se encendieron los deseos,
y carne y labios se juntaron.
Entre gemidos y suspiros
nos visitó la marea
y se escandalizó la luna
sobre tu espalda...
Rodamos en la arena
y nuestros labios
en pasión desbordada
guardaron el fuego y
consumidos descansamos.
Besos mi amada Pepita.
Y la respuesta se hizo verso
y el mar y los corales un deseo
fue la playa que absorta miraba
como el fuego poblaba cuerpo, alma
y los poemas estallaban.
Mis suspiros son suyos...
Una belleza tus versos , Josecito!!
Un abrazo
Amigaaaaaaaa, que comentario tan tierno.
Gracias amiga.
Un enorme beso y un gran abrazo para vos.
Me lo llevo al poema .
Abrazos ,amigos poetas.
Llévalo donde quieras
llévalo a pasear,
a caminar a correr o a volar.
Que lo lean en las plazas,
que lo canten en las calles,
que lo griten, que lo gocen.
Pero, sobre todo...
llévalo en tu pecho.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.