Domingos

Mientras disfruto del sabor y olor de un café, observando a cada persona que se sitúa en este lugar.
Pienso que tal vez ellos están aquí por la misma razón que yo lo estoy: para olvidar que todos sus días son domingos y vacilar fingiendo que disfrutan tanto este momento como si fuera lo último que contemplarán y olvidarse de lo trivial que su vida se ha convertido al no encontrar otro motivo por el cual suspirar y conspirar, por el cual sentirse más humanos.
¡Pero no! Tal vez ellos están bien con lo que son y sólo están aquí para tener un momento ameno.
Lo cierto es que yo estoy aquí porque soy una persona muy tétrica y quiero olvidar que todos mis días son domingos.