La divina providencia
me castigó
por no querer viajar
a Caracas
nadie se mantenía callado
el ruido de las balas
sellaba las mentes
de los locos
el oasis estaba cerca
y a la vez tan lejos
no había paz en mi corazón
porque?
los tanques accedían a
los refugios de los niños
en las mañanas
y tomaban por asalto el aire
acondicionado
la torre de Babel se mezclaba
con las sangres de la ciudad
el camino de regreso
seria doloroso
pero no quedaba otra
salida
- Autor: Francisco Dreamer (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de agosto de 2017 a las 12:03
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 60
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