!
La mitad de mi cuerpo estuvo en Marrakech
matando palomas mientras los demás miraban.
Les tiraba piedras del color del pan desde mi hueco,
y de pobres morían hambrientas.
Yo valgo menos que una paloma;
hace dos días que no como, pero no podré consumir migajas
porque sé que ocultan la muerte.
2
Su difraz blanco
celebrado entre sueños,
pude tocarlo, buscar su historia en él,
inventándolo,
pero el tercer día
el sol en silencio fue una forma del amor.
3
Con él viajé hasta la cercanías de las dunas.
Llegamos hasta un hamman (hamman = baño turco)
donde la lluvia y el calor nos hizo amigables,
uno junto al otro,
como antorchas que pelearan entre sí.
El deseo llevó su boca a mi boca.
4
No sólo lo que amamos es lo que perdemos:
el pájaro cóncavo de nuestros sueños
vuela
y dibuja una estampa desconocida
en el cielo.
GuillermoO
Direc.Nac. del Derecho de autor
- Autor: GuillermoO (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 14 de agosto de 2017 a las 19:45
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 33
- Usuarios favoritos de este poema: Necrofagotimes, errante
Comentarios1
Me gustó que empezaras por un "!" en lugar de un "1", error de tipeo quizás, pero completamente acertado.
Los valores del pan y las palomas dicen muchísimo sobre el valor de la mitad de ese cuerpo, muy bueno todo ese juego.
"(...) amigables,/ uno junto al otro,/ como antorchas que pelearan entre sí." ¡¡es hermoso!!
Y la cuarta estrofa, tremendamente cierta y acertada. ¡Excelente poema!
Muchas gracias por tu comentaio, amigo, y te acepto que el poema tuviera ese signo en vez de un numero. Veo que has ponderado muy bien mi poema; tengo el ego inflado por tu culpa.
Abrazo
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