El saber se desvanece,
sin reflexión…,
las escrituras desaparecen
en la maldición del pasado,
como se esfuman
las breves luces de
la tarde moribunda.
¿Qué nos queda?
La Nada.
La existencia sin ideales,
la espera de la muerte.
Se cultiva el cuerpo;
si no hay perfección…,
entonces,
se engorda
frente a la televisión,
comiendo soledades,
hasta que el aire
no pueda entrar
en los pulmones.
Sólo hay imágenes
de sexo, dinero,
poder, placer,
comer, soñar,
dormirrr, dormiirrr.
El pensamiento
se identifica con la Nada.
La Nada y el pensamiento,
una misma realidad.
La conciencia se ahoga
en intimidades subjetivas,
tímidas y carentes de vida.
El pensamiento
yace bajo las sombras
de huesos y gusanos
de viejos filósofos
olvidados y enterrados
en gloriosas tumbas.
- Autor: Gerardo Barbera (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 15 de agosto de 2017 a las 19:53
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 79
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.