Si te soy sincero
no traigo dinero
y,siendo honesto,
vengo con lo puesto.
Lo digo como lo siento,
no soy avariento.
Con el corazón en la mano
rehuyo lo mundano.
Ahora que la conciencia
brilla por su ausencia
y quedó la esencia
vista para sentencia,
ascenderé a la cima
de esta pantomima
para observar desde allí
el marchito jardín.
¡¿Que es lo que ven mis ojos?!
Vanidad,codicia y enojos,
bajo el consumista enjambre
un niño muere de hambre
y más al sur un pingüino
busca el hielo mortecino.
¡Si no lo veo,no lo creo!
normal...si soy ateo.
No hay dios que arregle esto
¿En que pensaría el día sexto?
No equilibró la balanza
de su imagen y semejanza.
¡Que horror,que desidia!
Me instalo aquí arriba
que lo esencial de la vida
no se vende ni se alquila.
Donde los sueños del ayer
se imponen al interes
y no hay más posesión
que el respeto y el amor.
- Autor: Joseponce1978 (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 21 de agosto de 2017 a las 20:27
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 48
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.