FRÁGIL VELETA
¿Por qué, jamás me dijiste, quedaba afuera, excluído?
aún los vástagos eran, apenas tiernos chiquillos,
amor eterno juramos, luciendo sendos anillos:
¡así pasé, bien lo sabes, mujer a ser tu marido!
Con nuestros hijos jugaba, el tiempo fue divertido,
conmigo daban saltitos, graciosos, cual cervatillos,
el sólo verlos crecer, alegres, sanos, sencillos:
¡me hacía adentro sentir, tenía el rol bien cumplido!
Creía estar disfrutando, aquella dicha completa,
el hombre más orgulloso, miraba allá en el espejo:
¡guiñando el ojo decía: conmigo está la receta!
Después rodaban mis lágrimas, veía el mundo perplejo,
igual el viento jugaba, y a mí tornó su veleta:
¡deseo sabio llegar, peinando canas, a viejo!
JAIME IGNACIO JARAMILLO CORRALES
Condorandino.
- Autor: Condorandino (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de agosto de 2017 a las 01:29
- Comentario del autor sobre el poema: Soneto Hexadecasílabo Pleno. La disolución de un hogar, es una de las mayores tragedias. Más aún cuando se tuvo por norte el amor eterno. Época de soñar despiertos y alegres, danzando sobre el filo de la adversidad. Cuánto duelen los hijos en este amargo trance. Que a nadie le suceda y si está en riesgo lo evite a todo precio, si es posible. Tema musical y vídeo: TRISTE FINAL - CAMILO SESTO (CON LETRA) DE: J.S. Condorandino.
- Categoría: Familia
- Lecturas: 35
- Usuarios favoritos de este poema: Dante Verne, JoseAn100, Hugo Emilio Ocanto
Comentarios5
Compañero del alma, compañero. Esto lo he vivido yo en mis carnes con toda la intensidad. Inclusive la sensación de felicidad plena. Menos mal que el tiempo da perspectiva, e incluso esperanza para maltrechos corazones.
Un abrazo
Compañero del alma, sí, compañero, porque eso somos. Cuando en común tenemos fuertes experiencias y hemos tenido que desfilar por la senda del impuesto desapego, que más bien parece un despeñadero. Sometida nuestra esencia a las altas temperaturas que nos ponen a prueba en el crisol de la existencia. Y aquí estamos, dando parte de tranquilidad, porque la ventisca ha pasado. Espero estar para tiempo aún largo, con la anuencia de quien nos situó en la escena.
Gracias amigo querido, Dante, por tus alentadoras palabras.
Un abrazo y saludos hasta la Península, de alma a alma.
Condorandino.
Con su toque de triste, que no le resta su belleza... saludos.
Amiga, Khadija (Alyamar), gracias por acercarte y posar tus ilustradas retinas en mis versos.
Un honor grande me dispensas. Valoro inmensamente tu loable comentario.
Un abrazo y saludos fraternales, de alma a alma.
Condorandino.
Parece que tu soneto en su belleza refleja tristeza.
Qué pases un buen día amigo.
Amigo y poeta, JoseAn100, versos que nos traen recuerdos, necesarios para elaborar esa catarsis liberadora. Si, hay tristeza acompañada de algunas lágrimas, pero después del vendaval llega la calma plena y reparadora.
Gracias por acercarte. Me dejas un refrescante bálsamo en tu comentario. Amigos como tú, son el acicate que nos anima a seguir haciendo camino.
Un abrazo y saludos fraternales, de alma a alma.
Que no hay cosa más bonita, ni que te quite más penas, que jugar con tus chiquillos mientras preparan la cena.
Abrazos de amistad para mi amigo Condorandino.
Menesteo
Apreciado y siempre muy querido amigo Menesteo, poeta de inmensa nobleza y reconocida sensibilidad, gracias por tus luminosas palabras. Me dejas un reparador aliento.
Un abrazo y saludos fraternales hasta la amada Península, de alma a alma.
Tu amigo por siempre.
Condorandino.
Sí poeta, la disolución de un hogar, es una de las mayores tragedias... de la vida.
Sobre todo cuando se tienen hijos.
Ellos cargan, en parte, con la tristeza que siente al ver a sus padres separados.
Y después... afloran las lágrimas.
Pero éstas no son de alegría...
Triste recuerdo. Tristes letras.
La vida debe continuar...
Por siempre mi amistad.
Hugo Emilio.
Si amigo entrañable y muy querido, el Gran HEO, de este amargo pasaje que sacudió mi vida, hace ya un puñado de buenos años. Ahora sólo son tristes recuerdos, para adobar igualmente unas tristes letras. Pero la razón siempre se impone, mis retoños conocen a conciencia las inexistentes causas.
Estos episodios con tintes de pesadilla, nos han dejado mucha experiencia, haciéndonos más maduros para la vida y también para las letras.
Un abrazo y saludos fraternales hasta tu bella tierra Argentina, de alma a alma.
Tu amigo por siempre.
Jaime Ignacio.
Condorandino.
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