30 de Agosto. He salido a hacer esta mañana un pequeño recorrido de mi casa a la ermita de San Antonio. La higuera del tío triburcio, las viejas garroferas, las casetas de toda la vida por las que he paseado desde mi infancia. Los nuevos avisperos como los de siempre. La ermita de San Antonio sin su campana porque ha sido robada, y su plaza a la entrada dando la bienvenida rodeada de pinos con la fuente para el vino que llenan el día el día grande , en medio. Cuando bajaba por el mismo sitio que he subido, he notado que todo ha cambiado al escuchar a mi vecina por mi espalda diciendo:
t´en portarem al lloc. Te llevaremos al puesto.
Léxico fascista que a estas altura del 2017 ya no sorprende, quizás hace 20 años me hubiera asustado. ahora lo creo posible. Sin embargo no he podido contenerme y he girado hacia ella.
¿ me dices a mi?
y aunque no lo escribo pero hablo valenciano, y ellos que hablan valenciano les hablo en castellano, le he preguntado de tal modo aguantando la rabia que me ha contestado con ganas.
Te llevaremos al puesto.
En esta persona, cuya familia es bastante famosa por su militancia en el PP, aunque yo les calificaría más de fascistas directos con anhelos represivos y ganas de fusilar en la tapia del cementerio, por lo menos a mi persona. Cosa que no me sorprendería que ocurriera. Le he preguntado a que se refería. Evidentemente en el léxico del pp y de los partidos fascistas, te llevaremos al puesto, es llevarte a la guardia civil para que te den el paseillo como a Lorca.
Quizás las cosas hayan cambiado, o quizás no y no tenga sentido lo que he dicho que no he cumplido.
Mira, ahora seré yo el que vaya al cuartel de la guardia civil y te denuncie por un delito de odio ideológico, por las difamaciones a mi persona que sé que hacéis, acoso y amenazas.
La buena señora que estaba colgando la ropa se ha metido en casa, y yo me he limitado pensando que si iba al cuartel de la guardia civil y la denuncia por decir:
te llevaremos al puesto.
Las posibilidades eran las siguientes.
o bien no harían caso ,y me pedirían pruebas,
o quizás me dirían:
venga angelillo que nos vamos al puesto de paseillo.
La verdad es que hoy en día no se sabe.
Parece todo igual, pero es todo diferente.
Me he contentado con ir al ayuntamiento y dejar constancia de los hechos.
A para mi, he escrito unos versos, para tranquilizar mi alma de esa acusación de rojo. Si ya no queda ninguno.
II.
El romance del emplazado por el partido popular.
! Mi soledad sin descanso!
como la de García Lorca.
Huyo por el descampado.
Porque me llevarán al puesto
Lo prometen a mi paso.
Si cruzo por sus puertas.
Estoy en una urna encerrado.
En San Antonio no hay tregua.
Vivo excluido custodiado.
Esperando que me envien
a ese puesto emplazado.
*
Quisieren llevarme a prisión.
con los brazos cruzados.
mordeduras de su odio
para pintarnos lo negro
En las tapias los entierros
Por eso me llevan al puesto.
Esto me lo han prometido.
Angelillo de Uixó.
- Autor: Angelillo de UIxó (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 31 de agosto de 2017 a las 15:18
- Comentario del autor sobre el poema: este poema está basado en hechos reales, su alma consiste que puede acabar en los juzgados, se trata de un delito de odio ideológico a través de la semántica, la expresión con la que me amenazan es la siguiente. te llevaremos al puesto, significa llevarme la cuartel de la guardia civil para que me asesinen.
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 21
- Usuarios favoritos de este poema: ZMRS
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