Corro tanto que casi vuelo.
Cuando paro y respiro,
reposo en el nido de una rama fornida,
que pasa desapercibida desde tierra.
Suelo hacerme presente sin ruido,
prefiero las situaciones que no chirrían.
Admiro a quienes lo intentan de nuevo,
sin hacer caso de batallas perdidas.
Alejado del infierno,
prefiero la perspectiva que da la distancia.
Me mueve el deseo
y escribo para batir las alas.
He comprobado que acumular obstáculos
es la excusa perfecta para no despegar del suelo.
- Autor: callejero (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 2 de septiembre de 2017 a las 08:51
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 39
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