Personajes principales.
Un payo.
La voluntad, como gitano.
Una voz grabada de un excluido que irá explicando la trama.
La ley del cuchillo como fondo, transformadora.
Escena primera.
Dentro de un hogar desolado en penumbra. Fuera un terrible sol y sequía. El actor, un payo vestido de gitano sujetando una piedra en la mano a la que habla apoyado en una pared bajo un candil que cuelga sobre su cabeza de un clavo oxidado.
Ayer me te arrojaron a mi casa para amedrentarme.
¿ cuántas van ?
Me encuentro ya entre la raza de los hombres malditos. Escenas terribles de persecución recorren mi juicio y enturbian mi animo. Llaman a mi puerta para atacarme. Destruyen mis sembrados y me someten a vigilancia. La sospecha ante cualquier ruido, el temor constante, la vida desarticulada y siempre en conflicto. se me ha prohibido llevar una vida decente. ¿ en qué me he convertido en estos años últimos que han pasado como un torrente amargo que me ha engullido? Todo empezó en el 2008, y ya estamos en el 2017. Mirando a su alrededor, la suciedad de la casa, el abandono, sus libros de la facultad de psicología llenos de telarañas, diplomas, el titulo de bachiller. Todo bajo un dedo de polvo.
¿ me ha tragado el final de los tiempos?
Gritando y arrojando la piedra contra una pared.
Y yo lo he consentido.
Escena segunda.
El actor vestido elegantemente escucha y baila por el comedor un vals de strauss sujetando un libro. un cartel nos indica que estamos en el año 2008. otro cartel nos explica que el actor es un trabajador y estudiante por la uned, la universidad a distancia de psicología. Cobra 1.400 euros al mes de nomina, sin contar extras, en una empresa química de compuestos para azulejos que está a punto de cerrar.
Lleva más de dos años con contratos encadenados de la ETT adecco.
Un último cartel nos indica que no imagina lo que va a sufrir a partir de ese momento.
La voz del actor secundario se activa mediante un relé temporal de su computadora.
año 2008, el trabajador forma una armonía mental con el sistema a través de unos esquemas mentales conseguidos a través de las mejoras materiales conseguidas gracias a las luchas sociales. Pero estos esquemas tienen implícitos otros modelos entre los que se bambolea la clase trabajadora como un tramoyista entre la exclusión social y la integración. Una ligera corriente, una pequeña perturbación en esta atmósfera artificial puede derribarle como un soplo de viento otoñal a las hojas de los árboles.
Truenos y bankia,
crueles oráculos detener el crack bursátil.
año 2008, 2009, 2010….
tambores del ABC, el mundo… diarios que dejan mudo y desembocan sesgos, errores, falacias. Una nueva moral creada por la policía economía, los sacerdotes de la política convierten a millones y millones de trabajadores en parias,
sin que hagan nada, porque su naturaleza se ha transformado con el espíritu de la ley.
en su propia contranaturaleza.
El éxito de esta nueva moral que se fortalece degradando al hombre, creando en el su antítesis, se materializa en la degradación, la humillación, la indisciplina, la desesperanza, la barbarie en la que se sumen los trabajadores. se revuelven entre si, destrozándose entre bandos de trabajadores emigrantes y nativos. Impera la ley de la balanza y de las migas de pan. En la ley de la balanza se acusan unos trabajadores a otros de haber creado la crisis, y con la ley de miga se pelean por las miserables ayudas sociales.
Los excluidos nacen entre ellos, como hijos malditos a los que no reconocen, como una nueva casta de intocables de los que todos huyen como apestados. Son alimentados por ONG, reciben caridad. Y cuando ven a sus vecinos y familiares, con los que antes mantenía una relación de igualdad, en estos fatídicos momentos la compasión y su degeneración a las que están sometidos les hace ignorarlos. Si antaño comieran juntos, eso ya no se recuerda, y ahora se les da la comida en un taper a los excluidos para que se la coman en casa, lejos de ellos.
La voz se va apagando. El actor ha ido despidiéndose de su ropa, aparece vestidos con harapos, como un gitano salido del cementerio vestido con ropas de un difunto al que hubiera atracado. tira de una carretilla como castigo cargando chatarra, algarrobas, agua para su huerta en un terreno ocupado.
Un rayo entra por la ventana y escribe en la chapa de la carretilla:
Los mandamientos para las legumbres impuras.
te alimentarás de tu huerta.
no tendrás agua corriente ni luz,
beberás de las fuentes y regarás tu huerta con garrafas que llenarás de charcos.
no te lavarás.
vivirás con perros como un perro.
vestirás con ropas que te den.
calzarás zapatos gastados por otros.
no fornicarás con mujer ni hombre.
no tendrás propiedad.
dormirás con pulgas.
Escena Tercera.
Un cartel nos indica que estamos en el año 2017. La misma casa sumida en el caos. El mismo actor se arrastra por el suelo con un trozo de pan duro en la boca. La carretilla está en el fondo. se acerca a ella y rebusca dentro de ella. Saca una sucia botella de agua y una cebolla. Bebe y mastica pan con cebolla, su alimento habitual.
Su mirada ya no es la de un ser humano, es turbia y asustadiza. Se escucha el sonido de un coche que pasa por el camino, y se tira aterrado bajo la carretilla por si es la policía. solloza como un animal castigado.
El relé del tiempo activa la computadora.
Aquí nos encontramos ya ante la moral de un sistema lógico y racional perfeccionado por maquinas. castiga y sanciona de forma exhaustiva e individual formado un colectivo de excluidos, que antes formaron parte de ese mismo sistema. Estos mecanismos de exclusión y selección de animales humanos en el 2017, no parecen todavía claros. Tienen en el tiempo el esquema realizado por los nazis a los judíos, sin embargo, ahora es todo mucho más miserable y perverso. El universo de la exclusión es cualquiera. Un judío, un musulmán, un nacional socialista, un comunista, un trabajador…Ya no hay un criterio moral para acabar siendo excluido, esta nueva especie desvalorizada por sus circunstancias sobrevenidas, y puestos enfermos por los liberales no haberse adaptado. Desgraciadamente para ellos, la mayoría de excluidos, adopta las conclusiones del sistema y del estado, que son claramente nocivas para sus intereses.
Un bálsamo para todos ellos es poseer, forjarse, la voluntad del gitano.
menospreciar la sociedad y el trabajo.
someterse a la autoridad cuando les sorprendan en el camino, y burlarse de ella por la espalda.
aceptar el estigma de la exclusión ,y crear un nuevo instinto anti sistema que con el tiempo, y el uso de la práctica: libere.
El actor sale de debajo de la carrerilla dando palmas ,coge lo que queda de un jamón que se había encontrado en el supermercado. Lanza el hueso al aire mientras pita la alarma. Se levanta, y abre la puerta lleno de fuerza con el hueso de jamón en la mano.
Angelillo de Uixo.
- Autor: Angelillo de UIxó (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 5 de septiembre de 2017 a las 16:54
- Comentario del autor sobre el poema: se aborda en esta obra sin prejuicios, el nacimiento de una nueva casta de pobres nacida de la crisis, los excluidos, gente que antes estaban integrado en el sistema. la obra lo aborda desde el punto de vista del sistema, intento esclarecer los objetivos marcados por los sacerdotes políticos . el éxito es indudable, yo soy la prueba viviente.
- Categoría: Cuento
- Lecturas: 22
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