Saliste temprano
dejaste la comida
sin hacer-
Volviste dejaste
los zapatos
afuera, tenías
mucho calor...
El cabello alborotado
por la humedad
estabas en el trópico
por primera vez,
sola,
serena
doblabas la esquina...
un transeúnte te
preguntó por donde
pasaba una línea de
autobus....
miraste hacia ambos
lados ,
no había más nadie
que él y tu.
Cerraste los
ojos y te largaste
al vacío con los
ojos cerrados,
confiaste en él
y cayeron los
dos ...
Uno enamorado
del otro no había,
un antes ni un
después solo
un nosotros que
comenzaba andar.
Comentarios1
hermoso poema. Saludos desde Venezuela
Gracias Alberto. me alegro que te haya gustado que tengas un bonito día saludos de amistad y afecto
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