Mañana clara, llena de rumores
de pájaros, el aire como pocas veces
tenía esa identidad..., casi tangible
respiraba y el aire
se venía a mí
en una profunda comunión.
Los colores de todas las cosas
me parecieron justos, definitivos
todas y cada una de esas cosas
tenían color, hasta la más oscura sombra
impresionó la mirada.
Todo hizo que fuera apreciado
expandí mi ser, hasta confundirlo
todo en una apoteosis
como nunca hube experimentado.
Sorprendida, te acercaste a mí
y en tus ojos, comprendí
qué poco, me quedaba por vivir.
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Autor:
Esteban Couceyro (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 7 de septiembre de 2017 a las 10:16
- Categoría: Amor
- Lecturas: 34
- Usuarios favoritos de este poema: pani, Menesteo, El Hombre de la Rosa
Offline)
Comentarios4
Entre las notas musicales amanecí en plenitud y conjunción con la naturaleza arrullada por las letras que hoy brotan magníficas desde las profundidades de un ser enamorado.
Espléndido versar, Esteban.
Sigue disfrutando este maravilloso día.
Es bueno reconciliarse con un magnífico amanecer, aunque el sol, no detenga su camino...
Demos gracias, por poder reconocer ese tipo de amaneceres.
Un abrazo
Esteban
MUY HERMOSAS LETRAS...
Gracias estimado Pani, cómo no reconocer un amanecer y su propia realidad...
Un abrazo
Esteban
Bello poema de amor y tristeza amigo Esteban.
Saludos
Como ya dije, estimado amigo, la vida es reconocimiento de las realidades.
Un abrazo fraterno.
Esteban
Mares de buena filosofía vierten tus bellas estrofas de amor estimado poeta y amigo Esteban...
Un placer pasar por tus versos..
Abrazo de amistad.
El Hombre de la Rosa
Gracias Críspulo, el placer es mutuo, somos como dos árboles añosos, que habiendo visto tanto, ya son parte del paisaje de la vida.
Un abrazo fraterno.
Esteban
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