Transcurre el pensamiento donde lo inerte vuelve,
la memoria se cruza entre fuertes caminos
llenos de cenizas y lágrimas, lagunas mentales
de vida sin un final, vida inmortal, del sueño y más.
Trozos del cielo se embullen en las pesadillas
cielo cerca del empíreo, ahuyentando Dioses
con versos fuera de lo divino, como algún griego
perdido en el Olimpo, con ansías de poeta,
pero al final termina maldito, loco, suicida.
Transcurren las olas del universo
entre luces del génesis
que se arrumban en un viaje infinito
sin un retorno jocoso, solamente llanto
entre la creación y la muerte.
¿Después la inmortalidad alegre?
Metamorfosis de las medidas del tiempo
se parten en un caos sin principio,
un tiempo sempiterno que gotea lastima
por los seres que mide
entre logros y fracasos
entre la vida y la muerte.
Transcurren los versos
por la vera del infierno, del paraíso, de lo eterno.
Creando los poetas un poema sin edad
que aumenta años interestelares
entre los lazos invisibles del cosmos.
Secretos y misterios se derraman en el parloteo
de los poetas ebrios, que mueren en la arcilla,
después de quedarse sin saliva, sin tinta, sin palabras.
Crece el verso eterno en el transcurrir de la poesía.
Se borra, se construye, se siente, pero nunca se olvida.
Comentarios1
Interesante.
Gracias por considerarlo.
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