¿Cuantas veces estuviste,
sin que yo me diera cuenta?,
¿cuantas señales perdiste?,
¿cuantas puertas entreabiertas?
¿Cuantas veces tu quisiste,
callarme con una promesa?
y tan solo sonreíste,
para no ponerme a prueba.
¿Por qué no me lo dijiste?,
sé que soy de las más ciegas,
yo no te vi y tú me viste,
jamás superé la niebla.
¿Por qué nunca compartiste,
el teorema en tu cabeza?,
¿por qué no te decidiste?,
y olvidaste la estrategia.
A veces quise rendirme,
consiente de tu belleza,
de tus bromas y el despiste,
sin temerle a la sorpresa.
Nunca lo supe posible,
eres como esos cometas,
que se van sin admitirte,
que volar no es un problema.
¿Por qué no me detuviste,
cuando me fui a otro planeta?,
¿por que siempre defendiste,
con honor todas mis guerras?
Sé que no soy la más simple,
también yo ignoré las cuentas,
a tu lado lo sublime,
y la intriga por bandeja.
¿Por qué nunca supe oírte?,
y me fallaron las piernas,
¿por qué no me desvestiste,
una noche de tormenta?
Y hoy que cada quien resiste,
en la piel más extranjera,
los dos sabemos que existe,
síntomas de turbulencia.
Tarde para descubrirte,
y besarte la prudencia,
tu ya tienes quien te cuide,
aunque solo yo te entienda.
- Autor: Olivera Dayana ( Offline)
- Publicado: 10 de septiembre de 2017 a las 16:03
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 105
- Usuarios favoritos de este poema: Texi, Julio A. Rocha, Sebastián Maldonado S., itxaso
Comentarios4
Quede enamorado de este poema, es muy muy muy muy bueno
Un placer que te haya gustado. Saludos
Me encanto la foto, muy buena
Gracias por apreciarlo.
¡Muy buen poema!
Un gusto.
me hace recordar mi primer romance de pubertad, muy buen poema niña, un abrazo
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