Con la mirada vacía de quien se pierde a sí mismo, yace desnuda, abrazando con sus muslos las estrechas caderas del silencio, todavía palpitante, adentro.
La contempla el amante satisfecho, degustando el sabor de sus mareas
Frente a ellos las presencias cabalísticas fueron testigos mudos de la consumación: antes, ella -soledad- había preparado el escenario preciso. Antes -ansiedad- había vencido la piel de infiernos a fuerza de provocar
Salpicada de sudores en plena madrugada, el espasmo todavía agita los residuos de su alma extraviada: atravesando el plexo, una mano intrusa rompe sin estridencias, mientras sus pechos erectos reciben los besos en la lengua del silencio, bebiéndola en su sal...
El tiempo ha llegado: toda la vida resulta vanidad
- Autor: Maria Angel Russo ( Offline)
- Publicado: 14 de septiembre de 2017 a las 07:10
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 40
- Usuarios favoritos de este poema: MAQUIAVELICA, Douglas Landaeta T.
Comentarios4
Solo te puedo expresar
una gran admiración,
por la forma de cantar
tu poema cual canción;
¡Excelente es tu versar
y genial esta composición!
Un abrazo desde la tierra manchega de:
joanmoypra
joanmoypra.
Admiración la mía, joan, por la facilidad que demuestras al escribir versos. Don natural que te otorgan las musas. Gracias por estar
Im-pre-sio-nan-te, no puedo decir más
Tu comentario me halaga y me compromete a ser mejor, siempre. Gracias por estar, Carlos
"el espasmo todavía agita los residuos de su alma extraviada" / elocuencia universal / mujer a plenitud envuelta en la magia de la palabra con o sin capitulación / Excelente
Gracias por tan bello comentario José Adolfo. Un abrazo fraternal
Foto titulada: "Lacena esta servida..." 🙂 🙂 🙂 Saludos
Buena idea! jajajajajajajajja
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