Y HABLAMOS DEL AYER Y DEL MAÑANA
Sentado en aquel banco te encontré
tu mirada, ¡tan llena de desgana!
despacito a tu lado me senté
y hablamos del ayer y del mañana.
Del ayer me contaste ¡tantas cosas!
me hablaste de la guerra y la posguerra,
de tus hijas que eran tan hermosas
de tus nietos, tu esposa y... de tu tierra.
Del mañana dijiste que temías
ir a parar a una residencia,
y la gente que tú tanto querías
no te haría feliz con su presencia.
Tus ojos se nublaron y los míos...
fueron los aflüentes de dos ríos.
- Autor: jarablanca ( Offline)
- Publicado: 15 de septiembre de 2017 a las 16:26
- Comentario del autor sobre el poema: Un recuerdo a nuestros mayores; Fuente de sabiduría y de amor.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 49
- Usuarios favoritos de este poema: Menesteo, Lolaila, gonzaleja, Hugo Emilio Ocanto
Comentarios5
Eso también es solidaridad, penar por los males de otra persona.
Saludos
Gracias, amigo. Para mí, nunca el dolor de otro es un dolor ajeno; pese a lo que se suele decir.
Un abrazo.
Precioso poema mi Jarita.
Nuestros mayores vuelven a la infancia y solo necesitan , al igual que los niños , nuestro cuidado y cariño.
Me ha emocionado tu bello poema.
Un abrazote grande.
Muchas gracias, Lolilla. La verdad es que es doloroso ver ancianos sentados en el parque, sin compañía ninguna, viendo pasar el tiempo... Ellos que nos dieron todo, enfrentan la recta final de sus dias, aparcados como si fueran cosas y no personas... Maldita sociedad donde importa más el tener, que el ser...
Un abrazo.
Jara:
Hermoso poema.
Y que bien lo has recitado.
Un abrazo de osito.
Jara garantía de calidad en todo es acercarse a tu espacio. Sobre el tema, linda manera de ser. Abrazo amiga
Excelentes tus letras, Jarablanca.
Y tu recitado, espectacularmente audible por tu gran talento.
Un abrazo.
Hugo Emilio.
Muchas gracias Hugo. Es para mí un honor tu elogio a mi recitado, porque tú eres maestro de maestros, en eso.
Un abrazo grande.
Bueno, digamos que estoy en segundo lugar...
tú eres la primer maestra.
Un abrazo.
Jeje!! Gracias por la deferencia, pero los dos sabemos que no es cierto. Pero gracias por tu generosidad.
¡ ERES DIVINA!
¡SOY SINCERA!
Lo eres. He sentido ser generoso porque eres una bella dama
y una excelente intérprete, aparte de esa voz... que es un deleite.
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