Aún estoy esperando la respuesta
de los gritos de la ternura allá en los prados
Sí, veo una amapola,
puede que sea su beso de despedida.
Ay, otro eclipse, puede que sea un pestañeo,
le habrá deslumbrado tanta luz reflejada en el lago.
Hice todo lo posible para olvidarte
pero siempre vuelves armado con tus legañas.
No, no hice todo lo que pude hacer, pude aún arrancarme el corazón del pecho,
pero mi alma cobarde no aguanta tanto sacrificio.
Mi instinto dice que siga corriendo,
Debe de quedar poco para la parada de tus sentidos.
Recorrerme tu tacto y tus papilas.
Puede que hubiese querido decir pupilas
pero las manos se me van,
no las controlo yo, sino mis entrañas.
Tan irrefrenable deseo me posee...
hay belleza en esa posesión,
no siento nada,
creo que se agotan las pestañas, tus pestañas
que son olas que me empujan a la orilla
pero la resaca del desamor me atrae adentro
¿de dónde?
De la victoria del desenfreno,
de las pupilas oscuras de la tentación
y del pecho amargo del deseo
- Autor: Carmen Martinez Diaz ( Offline)
- Publicado: 23 de septiembre de 2017 a las 09:24
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 23
Comentarios1
Enamorarse es recordar
imposible olvidar
solo esperar
que algûn dia vuelva a amar.
Bonitas letras bienvenida
Un abrazo
JAVIER SOLIS
muchas gracias!!
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