Duermes, como un tierno capullo,
Entre sábanas y almohadas.
Como aquella rosa que todavía no florece.
Y tu imagen es clara, como el café de las mañanas.
Te miro dormir, y parece que afuera,
No hay tiempo. Como si no hubiera día.
Como si el mundo; todo el mundo,
Fuera este pequeño cuarto, donde los dos estamos.
Despiertas, poco a poco.
A tiempo de verme viéndote despertar.
Y te sonríes. Como si me vieras,
Por primera vez.
La cama esta tibia para levantarnos pronto,
Volvemos a zambullirnos, en el silencio
De aquel profundo sueño,
Hasta que despierte el mundo.
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Autor:
deividstiven (
Offline) - Publicado: 25 de septiembre de 2017 a las 12:09
- Categoría: Amor
- Lecturas: 104
- Usuarios favoritos de este poema: Syol *, Ágora
Offline)
Comentarios2
....usted sabe hacer llegar la historia al lector...Me fascinó la frescura del discurso poetico...
Excelente trabajo !
Precioso poema. Saludos
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