MALDITA ACTRIZ

(Una balada para tí, con desprecio)

A que vuelves, si ya te eh olvidado.

Ya aprendí de este error.

Ya supe que fui un muñeco,

con quien has jugado.

Ya aprendí de este error.

A que vuelves, aquí ya no tienes nada que buscar.

Se que estuve por tí loco, culpable el amor.

El dolor que me dejaste pude surcar,

no me vengas con ese vago clamor.

Cuando tú te fuiste, aprendí a luchar,

aprendí que la vida tiene oportunidades,

aprendí que la cabeza no hay que agachar

y que todo lo tuyo nada vale.

Aprendí a odiarte y a extrañarte,

iba como loco a buscarte,

pero ni tu sombra llego a consolarme.

Hoy tarde me doy cuenta que no debí amarte.

Te escribía cartas cada año,

tonto de amor, yo me hacía daño.

Ya no quiero ni tus ojos ver,

 ésta vez no hay revés.

Estuve atado a tu capricho.

Sentía frío en el corazón,

y te pedí un poco de amor,

pero tú, ni lo dicho.

Te amaba y tú lo sabías,

estabas en mis pensamientos,

¡Como imbécil... Yo por tí moría!.

Lloraba frente a tí y tú reías,

no me evitaste ni un minuto de sufrimiento;

recuerdo que viví cuatro años esperándote.

Amándote, mí obsesión era tenerte.

Pero jamás regresaste.

Entonces tuve que aceptar perderte.

Hoy que vienes a mí, mira ya no hay matriz,

déjame decirte que te odio

y que eres una maldita actriz.

Y con estos versos, te digo adiós...