Personas corren escapando de monstruosas bestias verdes que los persiguen.
De pronto el fuego prende y
el lugar se llena de un gas que vuelve el aire más denso,
los ojos lloran, la piel quema,
las calles están completamente mojadas,
sin embargo, no llueve.
Observo a mí alrededor,
las bestias se llevan consigo a las personas,
las encierran en grandes maquinas del mismo color que ellos,
verde.
No sé dónde van
pero escuché, que cuando la maquina abre sus puertas,
ninguno vuelve.
Aun respiro ese aire que quema,
que duele,
que hiere mi libertad…
Y sigo sin entender,
¿Por qué las bestias están tan enojadas?
No obstante,
a esa altura ya no importaban los argumentos,
ya no había tiempo de responder interrogantes
debía correr,
y buscar la forma de escapar de aquella pesadilla.
Pero mientras corría noté
que la mirada de la bestia era idéntica a la mía,
tenía la misma expresión
Entre rabia y miedo.
De seguro no quería estar ahí,
Así como yo….
Sin embargo, corrimos hacía el otro
Buscando la destrucción…
- Autor: Alfonzina (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 16 de octubre de 2017 a las 00:30
- Comentario del autor sobre el poema: Es un poema que escribí de forma posterior a una manifestación en mi ciudad, en la cual exigimos que no se aprobara la construcción de un gasoducto en la playa de la zona. No obstante, aquel fue aprobado en esa ocasión provocando un desenlace que a mí particularmente me sensibilizó profundamente. El pueblo luchando contra carabineros, mientras los verdaderos culpables se encuentran protegidos.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 44
- Usuarios favoritos de este poema: ROBERTO. R, yosoyelquesoysiempre
Comentarios2
Con todas las heridas que de ella riegan al mundo podemos construir la verdad / en la que la bestia y nosotros nos hacemos a la barbarie / los milícos siempre serán gorilato del poder contra la humanidad / "Sólo en un sitio puede ser derrotada una sociedad: en el pecho de cada hombre" Rafel Cadenas / saludos poetisa
Esbirros de malvados más malos que los esbirros.
slds
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