Deja que el tiempo discurra por mis venas
como etérea sangre,
como ardiente vino,
que se asome al balcón de mis recuerdos
que cierre las ventanas del olvido.
Olvidar es morir en lo vivido
atrancar las puertas,
arrancar los nidos,
deshojar el árbol,
encalar los vidrios
arrasar la tierra,
enterrar suspiros,
apagar el fuego,
desecar el rìo
Que la ternura me acaricie el alma
con su piel desnuda
con su dulce trino,
con el beso frutal de la esperanza,
con el rumor de la mar en mis oídos.
Que la paz haga un nido en mi almohada
que me acune el sueño,
que me auyente el frio
que le guarde un hueco
a ese amor tan limpio
que me inunda el pecho
desde que era un niño,
y que así, no olvide
quien soy y que he sido.
- Autor: Jose Luis Posa Lozano ( Offline)
- Publicado: 27 de octubre de 2017 a las 06:29
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 31
- Usuarios favoritos de este poema: Texi
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.