Es necesario acallar el pensamiento, para que pueda surgir
la verdad. La sabiduría, no consiste en acumular acontecimientos,
sino en liberarnos de ellos, para que pueda emerger lo más
espontáneo de nosotros mismos sin condicionantes.
Para encontrarse con uno mismo, hay que desaprender lo aprendido
y lograremos una clara visión de cuanto nos rodea. Aprender a
escuchar, sin prejuicios u opiniones, hay que percibir la vida más
allá del ruido de las palabras.
Para escuchar debe haber quietud interna y atención relajada.
Casi todos vamos tras resultados, queremos alcanzar metas;
estamos siempre venciendo y conquistando, en consecuencia,
no escuchamos. Lo que aprendemos a lo largo de la vida tiene
que servirnos para caminar por nuestro propio pie, sin necesidad
de cargar con las lecciones y mucho menos con el maestro.
Comentarios3
Un arte imprescindible. Saludos
Un saludo
Emilio amigo:
Es un acierto vuestra reflexión.
Saludos afectuosos.
Mucha sabiduría en tu escrito, hay que desaprender para ser genuinos. Un saludo!
Gracias por el comentario
Un saludo
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.