A veces olvido que los cometas
se elevan con largos hilos.
Para elevarlos se debe estar
a campo raso…
entonces los elevo desde la mente.
(Y el pan es trabajo
hay que sacarlo de su escondrijo
y apedrearlo… para hacerle
sangrar los salarios.
Tú recibes lo tuyo por los
yugos pasados.)
Tal digresión… existencial creo,
me hace recordar que el cometa elevado
se desprendió de mi mano.
Cayó a la ribera del sol
-a su puesta-,
la última una vez.
No quedan más soles erguidos,
ni que se eleven carretes de hilos
hebrados de luengas plegarias.
Rebobinar…mucho menos.
- Autor: Inexistente ( Offline)
- Publicado: 5 de noviembre de 2017 a las 21:30
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 98
Comentarios2
Inexistentente, las esperanzas gastadas, hicieron de este un hermosisimo poema, conmovedor y realista, un cariñoso saludo, para ti.-
Gracias por leer y por comentar así sobre mi escrito. Feliz día.
*Leído.
Saludos.
Gracias B. Wayne por leerlo. Mis saludos recíprocos.
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