Recorriendo el curso natural del desarrollo;
Cultura impropia de la técnica al punto alcanzado
A hora, de pretender hacer sonar limpias alturas
Sostenidas por alcanzar su propio cielo imaginado
Siendo en la hondura infertil un pantano
De símbolos, frutos que aún no han madurado
Por soliloquios enclaustrados en pasiva espera
Por la activación de su mística figura, un empuje
Fuera marca su ausencia plena
Aquella fuente de alucinaciones recobrar quisiera
La imagen que nos fue a la fuerza arrebatada
La profundidad azulada, el espejo de lo eterno
Duplicando mar y cielo, develando su rostro
Eterno en la cordillera suave y alicaída
En el trigal relumbrando un sueño perdurable
La promesa por siempre presente de un mejor futuro
Recorrido anverso de la historia, universo
Paralelo donde la utopía fantasea siendo derrocada
Del eslabón perdido o vástago risueño
Ii
Un carácter camuflandose en la masa
Cómo un espía del cuerpo habitando
Un habitat pernocta al ser de lo humano
Equilibrado entre múltiples presiones
Conociendo sus oscuros lados, un sentir
Umbrio, que el otro por penetrar no puede
Senda tupida de imposibles y deseos excedidos
Son los medios que fortalecen su propia meta sistemática
Ah cuánto ha siendo ser de lo que el otro
Ha querido que sean, alimentados de violencia
Y temores infundados por mantener el status
Quo del amo y esclavo, el burgués siendo causa
Y consecuencia de su propia violencia, el ser
Se alimenta de sus cercanos, es un reflejo
De una luz divina o oscuridad perversa
Dependiendo de la esquina en que vino a vegetar al mundo
- Autor: Santiago Miranda ( Offline)
- Publicado: 23 de noviembre de 2017 a las 00:00
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 33
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