La llegada del invierno

No hay neblina en los dias cansados, el sol se ha olvidado de estos terrenos vacios y aislados. Una brisa con aroma a julio invade el aroma de las flores, el invierno grita su venida, dice que me enrolle en tus brazos calidos, pero ya las paginas han pasado, los tiempos han cambiado, y e de decirle al invierno, que tu ya no estas mas a mi lado.

El con su mirada fria piensa...”las nubes seran la respuesta”, “no, no es el calido resplador del invierno lo que necesito, no es un dia soleado lleno de parajes salados, necesito una llanura vacia donde puedo ver las flores, ver podrirse la flora del ayer, ver germinar los dias de hoy, para poder irme por un sendero de florez lleno de un mañana.

Una tristeza sin medida aborda al invierno y enseguida me lanza tormentas de ansiedad, solo hay alevosía, un tiempo seco, nada mas que ruinas. En medida comverso con el invierno llegamos a un acuerdo.

“Dame un cafe todos los dias, para despertar la mirada y ver con mejor claridad las sensaciones que plasmo en mis anotaciones, dame cigarros, para ayudarme a pensar que soy como tu, corto pero fuerte, impredecible e intermitente y por ultimo, dame cada dia una nueva oportunidad para amar, desde una mujer, hasta un buen amigo, talves un mendigo, un perro dejado en el olvido, o talves mi propio abrigo.