Una urraca ladrona de emociones
vampira de amores
sensible hipersensible
dadora de cariño sin obstáculo
encontróse una vez
con un huraño cuervo de nariz torcida
también vampiro ansioso de ternuras
sensible hipersensible
igualmente dador sin restricciones.
Y se revolotearon mutuamente
sin dejar de mirarse con sigilo
durante dias o tal vez semanas
probando darse amor y recibirlo
y descubrieron que con ese trueque
ese intercambio recíproco de afectos
el amor rebotaba mutuamente
y así se potenciaba
que crecia levaba prosperaba
alcanzaba niveles de epopeya
como un acople de amplificador.
Asi volaron sin dejar de amarse
de mirarse a los ojos
de acariciar el viento con sus alas
de acariciarse el cuerpo con su aliento
de alentar el deseo con sus cantos
de cantarse al oído con su vuelo
de volar espirales más estrechas
de estrecharse en un círculo de encuentro.
Ya se rozan, ya casi se desploman
en las alas del otro.
¿Qué ocurrirá cuando ese par de pájaros
se fundan en un nido de consuelo?
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Autor:
Julián Centeya (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 1 de diciembre de 2017 a las 14:08
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 42
- Usuarios favoritos de este poema: Ana Maria Germanas
Offline)
Comentarios3
Tórtolas
Tal vez....
Julian!!, bello !!, no podia serlo mas !!, pusiste ternura en mi y una sonrisa en mis labios, muchisimas gracias !!, cariños para ti.-
Qué hermoso comentario !
Si puse ternura en vos y una sonrisa en tus labios, qué más puedo pedir !!!
Gracias
Tienes un alma muy dulce, muchas gracias, adore tu respuesta, escribe, escribe mucho, que yo siempre estare atenta a leerte !!
Ups!!! Julián qué buen poema. Se parece a la danza del tango, cuando toma vuelo..... y con los zapatos poco a poco se acaricia el suelo... y en un momento, el abrazo es serpiente, fiera, tigre que asoma en la pradera...
Hermosa descripción del tango !!!
Gracias por tu comentario, Carina...
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