Perdida en pensamientos.
¿Donde estoy? ¿Que hice?
¿Por qué lo hice? ¿Cuándo lo hice? ¿Quién lastimé?
Perdida en pensamientos.
¿Quién soy? ¿De dónde vine? ¿Cómo llegué aquí? ¿Cuando llegue? ¿Quién dejé para atrás?
Perdida en pensamientos.
¿Quién perdí? ¿He sufrido?
Si es así, ¿por qué? ¿Quién?
¿Por qué sufrir?
Perdida en pensamientos.
¿Quiénes son esas personas a mi alrededor?
¿Por qué sonríen para mí? ¿Cual es el problema?
¿Saben quién soy? ¿Alguien sabe?
Perdida en pensamientos.
Si saben, ¿por qué no me lo dicen? ¿Dónde está mi voz? ¿Y mi fuerza? ¿Las perdí? ¿Dónde?
Perdida en pensamientos.
¿Estoy gritando, no me escuchan?
¿Estoy agitando , no me ven?
Estoy preguntando, ¿por qué no me responden?
Una vez más, ¿quién soy? ¿Qué paso? ¿Donde estoy?
Me digan algo.
¡Qualquier cosa! ...
Sólo, no me dejen aquí...
Perdida en este mar...
De pensamientos...
Confusos
- Autor: Estela R.R (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de diciembre de 2017 a las 07:21
- Categoría: Triste
- Lecturas: 44
Comentarios1
Carmela escribe cartas a gentes de todas partes del mundo a quienes nunca ha conocido, firmándolas con toda suerte de románticos nombres, jamás, desde luego, con el suyo propio. Carmela despreciaría las cartas anónimas y ¿quién sería tan poco práctico como para responderlas? Estas cartas maravillosas salen por correo aéreo, escritas en una forma celeste con la fina caligrafía de Carmela. Nunca llega una respuesta. La gente no tiene tiempo para nada realmente interesante.
Leonora Carrington
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