Carta de amor para un amor añejo, pero interrumpido...

Difícilmente creo que sepas
Lo mucho que se te extraña
Desde el día en que te fuiste
Hasta el recuerdo de ahora…

Las cosas que aquí son tuyas
Y que no dejaste nunca…
Pero aquellas cuyo fantasma
Se me revelan en cada hora

Lo que no puedo evitar, (ni quiero)
Es que ahora mi cama es ancha
Y que ya no soy culpable
De lo que hoy has de llorar

Otro consuelo es que no oigo
Tus razones para odiarme
Ni despierto a media noche
Por levantarme a fumar…

El teléfono no suena
Desde que a ti, no te llaman
Por eso si, oigo el ring
Sé que es una broma más

Y la puerta solo chirria
Cuando vuelvo desde el mundo
Y sigo entrando de puntas
Por si alguna vez estás…

Dos velas que tú dejaste…
Siguen sin prenderse nunca
Y la cena que he planeado
Nunca más se servirá…

Se desangra gota a gota
El contenedor del baño
Y yo sigo con mis miedos
Al silencio y la oscuridad

Seguro son coincidencias
Porque al volver a la ciudad
Por donde quiera que vaya
Todo tiene tu sabor

El metro, la calle ancha,
La gente que me atropella
Donde cada rostro extraño
Tiene tú mismo color

Quizás pienses que exagero
Si digo que en la misma banca
En que alguna vez te besara
Te platico todo de mí

Los sueños que he perdido…
Cuánto me duele la espalda
Y a veces hasta parece
Que te veo sonreír…

Hay noches que en tu recuerdo
Imagino tus caricias
Pero donde iba tu huella
Sólo hay un vacío lugar…

Y con rabia profano el blanco
De la vacía sábana…
Y me abrazo de una almohada
Que ya no te espera más…

Yo sé bien que esto que escribo
Realmente no te hace falta
Pero hay veces que el delirio
Nos hace escribir de más

Pero me era necesario
Describir lo que tú faltas...
Y ponerlo en esta carta
que no has de recibir jamás…